martes, noviembre 11, 2008

Godofredo Cinico Caspa

Dr. Godofredo Cínico Caspa: Qué orgullo patrio sentí al ver la revista esta semana que trae en la tapa al pacifista y cooperativo dignísimo gobernador de Antioquia doctor Alvaro Uribe Vélez, un hombre de mano firme y pulso armado, líder que impulsa con su aplomado cooperativismo pacíficas autodefensas, que él, iluminado en los soles de Farouk ha dado en llamar Convivir. Acierta la revista semana en cabeza del dirigente vástago de César Gaviria al proyectar sobre el escenario nacional a esta neolumbrera neoliberal de esta nueva época ¡caray! Es que a Alvaro le cabe el país en la cabeza. El vislumbra todo este gran país como una zona de orden público total, es decir, como un solo convivir ¡caray! donde la gente de bien ¡por fin! podamos disfrutar de la renta en paz, como debe ser. Y será él quien por fin traiga a los redentores soldados norteamericanos quienes humanizarán el conflicto y harán de Uribe Velez el dictador que este país necesita. Buenas noches.
Dr. Godofredo Cínico Caspa: Buenas noches, nuevamente con ustedes el distinguidísimo y eminentísmo doctor Godofredo Cínico Caspa, último bastión de la pulcritud y la moralidad en nuestro país. No quiero hacer referencia niguna al escandalito ese de esta semana que han armado estos neomoralistas de los noticieros haciendo alusión a los cheques y las financiaciones de campañas, ¿de dónde acá se ha visto que se le haga un escándalo a éso, si así funciona nuestra democracia? Ya lo advirtió bien el desviroladito este alcalde de Bogotá cuando dijo "todos ponen y todos toman". Dejen el escándalo ¡caray! ¡dejen trabajar! Yo mas bien voy a hacer alusión a un tema que por estos días se ventila en el honorable Congreso de la República, y hago referencia al Ministerio de la Cultura. No sé de dónde acá a la primera dama le dió el antojo -¡bueno! no sólo a la primera dama-, a las primeras damas, a doña fanny, a doña gloria, a doña amparo sinesterra, y a doña [jhackie], les dió el antojo del Ministerio de la Cultura. Mis queridas señoras ¡por dios! ¡¿Qué es esto?! ¡¿Pa´ dónde vamos?! ¿De qué sirve -les pregunto yo a ustedes cuatro-, de qué sirve un campesino bailarín? ¿de qué sirve un albañil poeta? Por dios, este país ha funcionado siempre durante su vida republicana con el método de [palo] y circo, señoras, ¡por dios! ¡cojan oficio, ala. Dejen la cursilería señoras, por dios, además sin presupuesto un ministerio ni da votos, ni da puestos, ni da cargos, señoras, por dios, dejen trabajar, y que viva la cultura para los puyana y los botero. ¡Buenas noches!
Doctor Godofredo Cínico Caspa: como siempre el doctor Godofredo Cínico Caspa, último bastión de la dignidad y el decoro nacional. Se debate por estos días en el honorable congreso de la república dizque la obligatoriedad del voto. ¿De dónde acá nuestros gobernantes quieren popularizar un derecho -un derecho y un privilegio-, de la gente de bien? No entiendo por qué no vuelven a las fuentes de la democracia y a los ríos de la tradición y consultan las constituciones del siglo diecinueve, cuando recordaban que quienes teníamos el derecho al voto éramos nadie más y nada menos que los varones, mayores de treinta y cinco años, casados, con renta superior a milquinientos pesos, y que demostrásemos actos de inteligencia. ¿De dónde acá las mujeres pueden votar? Que dejen en paz las urnas y vuelvan a la cocina. ¡No hay derecho ni que los comunistas, ni que los opositores voten! ¿de dónde acá eso? Ala. Seremos la gente de bien quien elija la gente de bien. Seremos pocos -es evidente-, pero con dignidad y sindéresis elegiremos a nuestros gobernantes.